Cómo Estar Sano Mientras Viajas: Consejos Esenciales Para Cada Viaje Javier Peinado April 25, 2025 EN ESPAÑOL Lanzarte a viajar puede significar tener que tomar precauciones sanitarias dependiendo de tu destino y que pueden abarcar desde algo tan simple como ponerte crema solar y cremas hidratantes para unas vacaciones en Florida a otras más complejas como someterte a una ronda de vacunas para un viaje a Sudáfrica. Además de estas medidas en base a lugares específicos, hay algunas medidas de prevención básicas que deberías siempre seguir en todas partes para reducir tus probabilidades de enfermar. Estas prácticas, simples y comunes, pueden ayudarte a defenderte de males que van desde un resfriado común a virus similares a la gripe como el COVID-19. Y si bien todos las conocemos, puede ser un desafío ponerlas en práctica cuando estás de viaje. ¡Por ello, aquí estamos para recordarte que estés vigilante y proporcionarte algunos consejos divertidos y aventureros para cuidar tu salud en vacaciones! Prioriza la Limpieza Una buena higiene es tu primera línea de defensa para no enfermar rumbo a tu destino. Comienza lavándote las manos a menudo con agua y jabón, especialmente antes de comer, tras usar el transporte público o después de tocar superficies de alto contacto como botones de ascensor, picaportes o barandillas. Si no hay agua y jabón disponibles, usa gel desinfectante para manos con al menos un 60% de alcohol. Lleva contigo una botellla pequeña de gel lavamanos en una bolsa o el bolsillo para que esté siempre a mano. También es inteligente llevar toallitas desinfectantes. Úsalas para limpiar rápidamente las bandejas de los aviones, mandos a distancia de hoteles o cualquier otra cosa que toque mucha gente. Y no te olvides de tu teléfono. Probablemente lo estés tocando todo el día, así que límpialo regularmente también. Tener todo limpio no conlleva mucho esfuerzo, pero puede marcar una gran diferencia a la hora de evitar gérmenes que pueden arruinar tu viaje. Consejo: es posible que a los niños no les guste el olor del alcohol o del gel desinfectante estándar. Haz que su experiencia (¡y la tuya!) sea más placentera usando una botella de gel aromatizado. Y si encuentras cortes o arañazos en sus manos, asegúrate de que están debidamente cuidados antes de usar el gel. Para niños muy pequeños, usa toallitas suaves. Y recuerda, secarlo todo bien es tan importante como lavarlo, ya que los gérmenes prosperan en lugares húmedos. Permanece Hidratado Viajar te puede secar rápido, especialmente en vuelos largos, climas cálidos y elevadas altitudes. La deshidratación puede sorprenderte cuando menos te lo esperas y dejarte un sentimiento de cansancio, mareo o incluso enfermedad. Adelántate a la deshidratación bebiendo agua regularmente a lo largo del día. Usa sólo agua embotellada o debidamente filtrada, especialmente en lugares donde no sea seguro beber agua del grifo. Esto incluye ser precavido con los cubitos de hielo y las frutas y vegetales crudos lavados con agua local. Si no estás seguro, no te arriesgues. Una cosa más: asegúrate de usar botellas de agua reutilizables con un purificador incorporado. Te ayudan a ahorrar dinero, reducen el uso de plásticos y te permiten estar hidratado sin importar dónde estés. Complementa el agua embotellada que puedas beber en el avión y en tu destino con alimentos que tengan un alto contenido de agua o electrolitos como pepinos triturados, rodajas de sandía, aguacate, plátanos, naranjas, nueces sin cáscara y yogur natural (el cual tiene más de un 85% de agua). Ten cuidado en países extranjeros, y asegúrate de comer frutas y vegetales que puedas pelar después de haberlos lavado bien incluso con un bactericida. Puedes consumir estas comidas libre de culpa, ya que no te dejarán hinchado y darán a tu sistema inmunitario un muy necesitado empujón. Consejo: brindamos por tu salud con un consejo adicional. Aléjate de las bebidas con hielo en ellas, ya que los cubitos vienen de agua del grifo que podría ponerte enfermo. Toma Decisiones Inteligenes Con Tu Asiento: Pasillo Contra Ventanilla El lugar donde te sientes en el avión puede afectar de manera efectiva tus probabilidades de enfermar. Un asiento de ventanilla te mantiene alejado de la gente que se desplaza por el pasillo, lo que significa menos contacto con gérmenes circulando alrededor. Una vez te sientes, dedica un minuto a limpiar tu espacio. Pasa toallitas por los reposabrazos, cinturón de seguridad y pantalla táctil…básicamente, cualquier cosa que vayas a tocar durante el vuelo. Si terminas en un asiento de pasillo, lleva aún más cuidado: es más fácil chocar codos con otros pasajeros o ser empujado por gente que se dirige al baño. Intenta mantener tus manos alejadas de tu cara y usa gel desinfectante regularmente. Una pequeña estrategia al elegir asientos puede ayudarte mucho a permanecer sano mientras vuelas. Consejo: asegúrate de usar toallitas desinfectantes en tu asiento, bandeja, reposabrazos y monitor de vídeo, múltiples veces y para todos tus “acompañantes.” Fortalece Tu Sistema Inmunitario Viajar puede alterar tu rutina habitual, pero fortalecer tu sistema inmune debería seguir siendo una prioridad. Comienza por intentar dormir al menos 7 u 8 horas por la noche para ayudar a tu cuerpo a combatir enfermedades y recuperarte del estrés del viaje, Y come de manera inteligente mientras estás de camino: cárgate de frutas, vegetales y aperitivos ricos en proteínas para dar a tu cuerpo el combustible que necesita. Es fácil depender de la comida rápida o comidas de conveniencia, pero tu sistema inmune funciona mejor si te alimentas bien. También podrías considerar suplementos como vitamina C, probióticos o refuerzos inmunológicos. Eso sí, revisa antes con tu doctor qué es adecuado para ti. Consejo: para facilitarte el cambio entre zonas horarias, intenta ajustar tu horario de sueño unos pocos días antes del viaje. Un ajuste progresivo significa menos estrés para tu cuerpo y una mejor energía cuando llegues a tu destino. Vístete Bien y Protege Tu Piel Ya te dirijas a la playa o un sendero de montaña, meter en la maleta el equipamiento correcto te mantiene cómodo y seguro. Comienza con la crema solar…sí, incluso en climas templados o nubosos. Los rayos ultravioleta no toman vacaciones, y tu piel necesita protección todo el año. Vístete en capas, especialmente durante los días de viaje. Los aviones, trenes y autobuses pueden cambiar la temperatura de heladora a sofocante en cuestión de minutos. Las capas hacen que sea fácil ajustarte sin sobrecargar tu equipaje. Si vas a algún lugar con mosquitos, lleva repelente de insectos, especialmente en áreas donde los bichos puedan portar enfermedades como la malaria o la fiebre del dengue. Consejo: intenta elegir una crema solar y repelente para insectos biodegradables si puedes. Son mejores para el medio ambiente, y funcionan igual. Mantente en Movimiento Sentarte durante largos períodos de tiempo — en un avión, tren o automóvil— puede dejarte rígido y con pocas energías. También afecta a tu circulación sanguínea, lo que puede incrementar el riesgo de cosas como trombosis en las venas (DVT). Habitúate a levantarte y moverte cada hora en trayectos largos. Camina por el pasillo, estira tus piernas o incluso haz algo de ejercicio mientras esperas en una fila. No necesitar ir al gimnasio para estar activo. Aprovéchate de los centros de fitness de los hoteles, únete a un recorrido para andar o prepara una rápida tabla de ejercicios en tu habitación. Incluso 10 minutos podrían suponer una diferencia. Consejo: ¿quieres simplificar las cosas? Mete en la maleta una banda de resistencia o una esterilla de yoga. Pesan poco, no ocupan mucho espacio y te facilitan permanecer activo donde quiera que vayas. Minimiza el Estrés de Viaje Viajar no siempre es algo fluido. Retrasos, multitudes y contratiempos inesperados pueden afectar tu humor y desanimarte. Es por ello que cuidar tu salud mental es tan importante como estar alerta con los gérmenes. De modo que, cuando la cosa se vuelva caótica, tómate un momento para respirar…literalmente. Respirar profundamente o un breve ejercicio de relajación puede ayudarte a reiniciarte y mantener los pies sobre la tierra. Deja tiempo suficiente entre actividades para que no vayas corriendo de un lugar a otro. Permitirte este tiempo adicional de maniobra te ayuda a mantener tu día flexible y tus niveles de estrés bajos. ¿Añoras tu hogar o te sientes sobrepasado? Contacta con alguien conocido. Una llamada o mensaje de texto rápido a alguien que esté en tu país de origen puede hacer maravillas en tu salud mental. Consejo: no te olvides de meter en la maleta un pequeño kit de autoayuda — piensa en aceites esenciales, música relajante o un libro que disfrutes. Unas pocas comodidades simples pueden hacer mucho por relajarte sobre la marcha. Primeros Auxilios y Seguro de Viaje Por supuesto, no puedes planear si te vas a poner enfermo o vas a resultar herido en un viaje. Pero estar preparado puede ahorrarte mucho estrés si algo sale mal. ¡Una pequeña dosis de preparación puede prevenir una disrupción mayor después! Comienza por traer un pequeño kit de primeros auxilios que incluya vendas, calmantes, medicamentos para mareos y cualquier otra prescripción que tomes habitualmente. Si tienes alergias o condiciones crónicas, trae lo que necesites y un pequeño extra, por si acaso. Antes de partir, busca clínicas cercanas a tu destino. Saber a dónde ir en caso de emergencia te puede dar mucha paz mental. Y no te saltes el seguro de viaje. Si viajas al extranjero, asegúrate de que tu plan cubre emergencias médicas. Puede suponer una gran diferencia si necesitas cuidados lejos del hogar. Consejo: guarda una copia de tu información médica y contactos de emergencia, ya sea impresa o guardada en tu teléfono. Si necesitas ayuda rápidamente, tendrás todo lo que necesitas en un único lugar. También Te Podría Interesar: La Carta de Derechos del Pasajero de Aerolínea Preguntas Frecuentes: P: ¿Qué vacunas debería ponerme antes de un viaje internacional? R: Depende de tu destino. Visita una clínica de viaje o revisa la página web de viaje del CDC para ver qué vacunas son recomendables o requeridas para tu viaje. Algunas vacunas deben ser aplicadas con semanas de antelación, así que planifica adecuadamente. P: Puedo traer gel y toallitas desinfectantes a un avión? R: Sí. La TSA permite recipientes de gel lavamanos de hasta 12 onzas en el equipaje de mano, y las toallitas desinfectantes están permitidas sin restricción de tamaño. Simplemente asegúrate de que resulten fáciles de acceder durante el vuelo. P: ¿Cómo puedo evitar ponerme enfermo en habitaciones de hotel? R: Lava con toallitas artículos como interruptores de la luz, mandos a distancia y picaportes. Evita beber de vasos de hotel salvo que estén sellados. Usa tus propios artículos de baño siempre que sea posible. P: ¿Cuál es la manera más segura de comer comida callejera mienras viajas? R: Escoge vendedores con mucha clientela y comida fresca. Evita productos crudos y cualquier cosa que haya estado mucho tiempo reposando en el exterior. Busca lugares donde los locales hagan cola para comer…es normalmente una buena señal. P: ¿Cómo puedo mantenerme saludable en un vuelo que dure toda la noche? R: Bebe agua regularmente, evita el alcohol e intenta dormir usando una almohada para el cuello y una máscara para los ojos. Limpia con toallitas el área de tu asiento y lávate las manos tras tocar superficies. P: ¿Merece la pena comprar un seguro de salud en viajes cortos? R: Sí, especialmente si es un viaje internacional. Incluso los viajes cortos pueden conllevar problemas médicos inesperados, y el seguro cubre desde visitas al doctor a evacuaciones de emergencia. P: ¿Qué debería meter en un kit básico de primeros auxilios? R: Incluye calmantes, medicamentos contra el mareo, medicina contra alergias, vendas, toallitas antisépticas, un termómetro y cualquier otra prescripción personal. Personaliza tu botiquín de acuerdo con tus necesidades y destino. De modo que has seguido algunos de estos consejos para permanecer sano mientras viajas. ¿Y si compartes ahora otros que tengas en nuestra sección de comentarios?